1.- "EL Arrebatamiento (Rapto) de la Iglesia" ¿Cuando será?

Publicado: marzo 23, 2010 en Uncategorized
«EL Arrebatamiento (Rapto) de la Iglesia» ¿Cuándo Será?
Por Jorge Trujillo
Mensaje del Autor

La posición más antigua con respecto a cuando acontecerá el arrebatamiento de la iglesia, es la ‘pos-tribucionalista’. De hecho, esa ha sido la única posición de la iglesia cristiana por 19 de sus 20 siglos de historia inclyendo los reformadores protestantes del siglo XVI (16). No fue sino hasta mediados del siglo XIX (19), después del 1830 y en los comienzos del siglo XX (20), especialmente después de la Segunda Guerra mundial cuando que se propagó la creencia muy popular entre algunos grupos evangélicos de que la iglesia no pasaría por la gran tribulación final. Esto nos lleva a preguntarnos si la iglesia estuvo equivocada por tanto tiempo sobre un tema tan importante como este o si se equivocan los que ha traído una nueva doctrina. El siguiente es un estudio desarrollado con el propósito de investigar cuidadosamente al texto Bíblico con relación a la doctrina del arrebatamiento de la iglesia, comunmente referido como ‘el rapto’. Mucho se ha debatido en los últimos 100 años en cuanto a si este evento tan esperado acontecerá ántes del periodo conocido como la gran tribulación (Pre-tribulación), en medio de la gran tribulación (Medo/Mid-tribulación), o al final de la tribulación (Post-tribulación). Por medio de este corto, pero detallado y preciso estudio bíblico hemos entendido que la iglesia ha pasado, pasa y pasará por la tribulación, eso es lo que la Biblia nos enseña. Le pido que tome su Biblia, lea cuidadosamente y analice por usted mismo. Muchos viven pensando que tendrán una segunda oportunidad después que Cristo venga pero lo cierto es que la única oportunidad que existe es la que tenemos ahora. «Hoy es del día de salvación, si oyeres hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones.»

INTRODUCCIÓN
Los Cristianos por toda la historia han creído y siguen creyendo en la promesa que Jesucristo volverá a la tierra con poder y gloria. Creemos que su reino eterno será establecido por Él en la tierra nueva y los cielos nuevos y que serán días de gran eterna bendición, justicia y paz incomparables. También entendemos a través de las Escrituras que la Venida de Cristo pondrá fin a los días de la gran tribulación y acabará con el mundo como le conocemos hoy y que el castigo de Dios será sobre la tierra en los días del fin. Su venida marcará el fin del gobierno humano y dará comienzo al gobierno celestial del Reino de Dios o el Reino de los Cielos de acuerdo a como lo llama el evangelista en Mateo. Será entonces el fin de este siglo (edad o era), como lo describe Jesucristo en Mateo 24; Marcos 13; Lucas 13:35-48; 21. Juntamente con eso creemos en otra promesa de Cristo que dijo volvería por nosotros y nos tomaría a sí mismo, para que donde El este nosotros estemos por siempre con Él (Juan 14:2-3). Este evento es conocido como el arrebatamiento de la iglesia de acuerdo a…
I Tes. 4:16-17
«Porque el Señor mismo con voz de mando, con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitaran primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado vivos, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor».
Este evento tendrá lugar en algún punto futuro en nuestra era marcando así el fin del mundo. Ahora podemos hacernos la pregunta que encabeza este estudio: EL ARREBATAMENTO (RAPTO) DE LA IGLESIA: ¿CUÁNDO SERÁ?
Aunque hay algunos grupos cristianos que no creen en que ocurrirá tal evento, la mayoría de los cristianos de fe ortodoxa creemos que sí ocurrirá. Como ya dijimos, entre los que creemos que sí habrá un arrebatamiento de los santos para recibir al Señor en el aire, existen variadas creencias o doctrinas en cuanto a cuando ha de ocurrir este evento. Algunos creen que ocurrirá siete años* antes del fin del mundo, otros que ocurrirá en medio de los siete años y otros creemos que ocurrirá al final de la tribulación, al final de la gran tribulación, en el día postrero.
*(Los pre-tribucionalistas creen que la tribulación final durará siete años).
NADIE SABE EL DIA NI LA HORA
Es cierto que Jesús dijo: «El día y la hora nadie sabe, ni aun los Ángeles de los cielos, sino solo mi Padre» Mateo 24:36. Es un error el tratar de fijar fechas, días, y horas como han hecho algunos falsos profetas y falsos maestros y han quedado en vergüenza. Ahora, es interesante el ver que aunque Jesús no dio ni día ni hora, nos dio señales y tiempos por los cuales debemos mirar para tener idea de cuando serán estas cosas. En Mateo 24:42, Jesús dice: «Velad pues porque no sabéis a que hora ha de venir vuestro Señor. Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis». El creyente esta llamado a estar en vela, esperando la «venida del Hijo del Hombre». Jesús además nos deja dicho: «De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama esta tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas.» Mateo 24:32-33.
LA VENIDA DE CRISTO
Aquí podemos hacer una pausa y meditar en estas palabras, la Venida del Hijo del Hombre. Cristo mismo les dijo a sus discípulos que esperaran Su venida. Si miramos un poco mas atrás en los versículos de Mateo 24:37-39, vemos como Jesús le dice a sus discípulos «Mas como en los días de Noe, así será la venida del Hijo del Hombre». Cuando Jesús decía que los días serían como en los días de Noé, no se refería a Noé sino al comportamiento y la actitud indiferente de la gente en los días de Noé. Esto lo sabemos porque inmediatamente después de decir estas palabras dice:
Mateo 24: 38-39
«Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dándose en casamiento, hasta el día que Noe entro en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevo a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre»
Tal como lo vemos hoy, el tiempo de la Segunda Venida de Cristo será un tiempo donde todo andará aparentemente normal, la mayoría de la gente no da importancia al llamado del evangelio de Dios, siguen en sus fiestas y placeres y pecados y no oyen la voz Dios que les llama. Así era en los días de Noé, y así es en nuestros días, y será hasta la venida de Cristo.
¿QUE ES LA VENIDA DE CRISTO?
Cuando usamos el término la Venida de Cristo, nos estamos refiriendo a la Segunda Aparición personal de Cristo. En el libro de Hechos, cuando Jesús ascendió al cielo, nos dice:
Hechos 1:10-11
Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo entre tanto que El se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por que estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.
El escritor del libro de Hebreos nos dice en Hebreos 9:28: «así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le esperan». La primera venida de Cristo fue humilde en un pesebre y fue crucificado por los hombres, pero en su segunda venida, vendrá a la tierra a destruir Sus enemigos, a juzgar a los hombres y establecer el reino eterno, el reino de los cielos. La segunda venida del Señor será visible, es decir esta venida será vista por todos, Jesús les dice en el encabezamiento de las cartas a las siete iglesias:
Apocalipsis 1:7
He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por Él . Sí, Amen. Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.

A las siete congregaciones, parte integrante de la iglesia de Cristo, no se les da esperanza alguna de ser salvadas por un rapto invisible sino que se le dice que Jesucristo vendrá por ellas y que cuando eso ocurra todo ojo le verá. A medida que habla a cada iglesia, les amonesta a esperar y ser fiel y vencer «hasta que él venga» (Rev. 2:25) y esta venida es la visible que fue descrita al encabezamiento de las siete cartas en Apocalipsis 1:7 como leímos arriba.
Es preciso que notemos que la Biblia habla solo de dos venidas, la primera donde murió en la cruz con relación al pecado, y la segunda, donde vendrá con poder y gloria «sin relación al pecado» a salvar a los que le esperan, Hebreos 9:28. No vemos tres venidas ni dos venidas y media venida, solo vemos dos venidas. La segunda venida de Cristo con poder y gran gloria debe ser la esperanza del creyente. El apóstol Pablo y el apóstol Pedro en sus cartas nos escriben que debemos de esperar ese gran día con gozo y alegría. Miremos algunos versos:
Tito 2:13
«Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo»
2 Timoteo 4:8
Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida
2 Pedro 3:12
Esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán.
Interesantemente todos estos acontecimientos que menciona Pedro han de tomar lugar después de la gran tribulación, tal como lo dijo Cristo mismo en Mateo 24:29. También debemos notar que de acuerdo a Pedro los creyentes estamos esperando «la venida del día de Dios» la cual es sinónimo de «el día de nuestro Señor Jesucristo» y de «la Manifestación de nuestro Señor Jesucristo» como lo dice Pablo. Veamos el próximo verso:
1 Corintios 1:7- 8
De tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo; el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis irrepresensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo.
En este verso vemos claramente que los creyentes estamos esperando la manifestación gloriosa de nuestro Señor Jesucristo lo cual es sinónimo del día de nuestro Señor Jesucristo, y el cual no ocurrirá hasta que llegue el fin y será después de la gran tribulación. Pablo estaba consciente de esto. Él sabía muy bien que «nuestra salvación se ha de completar en el día del Señor».
EL DIA DEL SEÑOR NO ES LA GRAN TRIBULACIÓN

Algunos pre-tribucionalistas hacen diferencia entre «el día de Cristo», el «día del Señor Jesucristo» y «el día del Señor» y el «día de Dios» como si fueran días separados, se dice que el día de Cristo es el rapto y el día del Señor la manifestación siete años más tarde, sin embargo la Biblia no ofrece indicación alguna de que esto sea así. Si estudiamos detenidamente el próximo verso cuando Pablo hablaba acerca de aquel que estaba pecando y el cual debía ser disciplinado, Pablo dice: «el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor» (I Corintios 5:5). Aquel a quien Pablo se refiere era/es tan parte de la iglesia como lo somos nosotros ahora casi dos mil años después. Ese fue uno que durmió (murió) en el Señor y por lo tanto será resucitado en el arrebatamiento de la iglesia el cual según Pablo Será «el día del Señor» (al fin de la tribulación), no siete años antes del día del Señor.

Debemos recordar que de acuerdo a nuestro creencia Trinitaria existe solamente «un solo Dios» y «un Señor» no dos ni tres señores. Los pre-tribucionalistas no deben separar el «día de Dios», «día del Señor» y el «día de Cristo» ni el «día del Señor Jesús» como si fueran referencia separada al día del Padre como Señor y al día del Hijo como otro Señor. La frase «el día del Señor» es referida en el Antiguo Testamento como un día de juicio e ira de Jehová sobre el mundo entero (Joel 2:11, 3:15), pero debemos entender que el Jehová del Antiguo Testamento es el mismo Cristo del Nuevo Testamento. En la carta a los Tesalonicenses, Pablo enlaza el día de la venida de Cristo y el arrebatamiento (nuestra reunión con Cristo) al día del Señor demostrando así que el arrebatamiento ha de tomar lugar ese mismo día. Pedro también nos habla de que nosotros (Cristianos) esperamos «el día del Dios» (2 Pedro 3:12) en el cual los cielos y la tierra serán consumidos por fuego. Si comparamos la descripción que nos da Pedro del «día de Dios» en su segunda carta y la que ofrece respecto al «día del Señor» en su relato en el libro de Hechos (2:19-20) nos daremos cuenta que se refiere al mismo evento.

En vista de lo que hemos explicado arriba algunos pre-tribucionalistas enseñan que el día del Señor es la gran tribulación pero una vez más esta idea tampoco es bíblicamente sostenible. El día del Señor viene ‘después’ de la gran tribulación. Ya vimos que éste día es descrito por Pedro como un día el cual será ‘introducido’ con señales en el cielo cuando habrán «prodigios arriba en el cielo y señales abajo en la tierra: sangre, fuego y nubes de humo.El sol se convertirá en oscuridad y la luna en sangre antes que llegue el grande y esplendoroso día del Señor» (Hechos 2:19-20). Cuando estudiamos los eventos relacionados al tiempo de la gran tribulación en Mateo 24 leemos que los eventos descritos por Pedro en Hechos también son incluídos en el relato de Jesucristo y son puestos cronológicamente ‘después’ de la gran tribulación y no antes:

Mateo 24

29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 31 Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

Claramente vemos que como el día del Señor es ‘precedido’ por las señales en el sol y la luna y la tales señales ocurren ‘después’ de la gran tribulación, entonces por obligación la gran tribulación no es, ni incluye el día del Señor. La lectura de Mateo nos dice que después de las señales en el cielo «aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo» y «enviará a sus ángeles que junten sus escogidos de los cuatro vientos desde un extremo del cielo hasta el otro» lo cual es una referencia al arrebatamiento de 1 Tesalonicenses 4:15-17 y nuestra reunión con El en 2 Tesalonicenses 2:1.

EL FIN DEL MUNDO

Entendemos que el fin del mundo es uno solo. No pueden haber dos ‘fines’; habrá solo un fin. Hablando del fin, deseo también añadir aquí un verso que me causó gran interés mientras preparaba un estudio sobre evangelismo. En Mateo 28:20 dice: «enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amen». Es imposible que Jesucristo esté con la iglesia que predica y enseña a los nuevos discípulos día por día ‘hasta el fin del mundo’ si estos se van al cielo siete años antes del fin del mundo. Simplemente no tiene lógica. ¿Cómo es posible que Cristo esté con aquellos que andan predicando y haciendo discípulos hasta el fin del mundo si estos se fueron al cielo 7 años antes del fin del mundo?

Una vez más vemos el siguiente verso: «el tal sea entregado a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor». I Corintios 5:5. «el tal sea entregado a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor». (I Corintios 5:5). La salvación de los creyentes ocurrirá o podríamos decir mejor, será consumada, en el día del Señor Jesús el cual será en su segunda venida:

La segunda venida del Señor es entonces el evento el cual los creyentes en Cristo esperamos con gran deseo, tal como lo hacían Pablo y Pedro, los demás apóstoles y los creyentes del tiempo de la Biblia. En ese día seremos resucitados, transformados y vivificados.

¿QUE ES LA RESURECCIÓN DE LOS MUERTOS?

Esta doctrina es de suma importancia si queremos saber con certidumbre cuando será el arrebatamiento de la iglesia ya que este evento y la resurrección de los muertos en Cristo tendrán lugar al mismo tiempo y el mismo día.

La resurrección de los muertos es la esperanza de los que mueren en Cristo. Jesucristo mismo nos prometió resucitarnos:

Juan 5:28-29

No os maravilléis de esto porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

Aquí Jesús nos introduce al concepto de la resurrección (aunque está enseñanza era la de los fariseos, Jesucristo la afirma), la cual ha de tomar parte en orden separados pero al momento de la venida de Cristo. Primero los que hicieron los bueno y después los que hicieron lo malo, la Biblia entonces nos enseña una resurrección general de buenos y malos el día de la Segunda Venida de Cristo.

(Continuará…)

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